El dominio y control del entorno que nos rodea a sido un objetivo del se humano durante toda su existencia. Dentro de esta necesidad innata, está igualmente la de dominar el espacio y su representación. Poder dibujar lo que se ve, es un reto que nos preocupa desde sus inicios, como raza, y a cada uno de nosotros, como individuos, desde que nacemos. Pero dentro de esta necesidad, hay, como no, muchos retos como saber imitar los colores, intentar imitar las formas, las texturas... y como no, saber imitar el espacio.
Tenemos que empezar conociendo algunos conceptos que nos pueden ayudar en este reto:
El espacio se tridimensional, es decir 3D. Podemos hablar de anchura, altura y de profundidad. O si preferimos de arriba, abajo, derecha-izquierda, y delante- detrás.
Si hablásemos de vídeo consolas estaríamos hablando de la wii, que reconoce tanto los movimientos de arriba-abajo e izquierda-derecha, como los de delante-detrás.
Otro ejemplo de aparentes 3D, serían los juegos como el Pro.evolution, en los que permite desplazamientos hacia delante y hacia atrás.
Si por el contrario hablamos de 2D, es dedir, dos dimensiones, nos referiríamos a algo plano (arriba-abajo, izquierda-derecha). En cuanto a dimensiones hablaríamos de alto y ancho.
Sus ejemplos en vídeo-consolas serían la mayoría como la Play, que reconoce solo estos movimientos arriba abajo, izquierda-derecha.